15.1.15

Ardor en las piernas. Un plan de viaje en pausa. El miedo al enojo de quienes te importan. La duda de haber actuado correctamente. Deseo de explotar esos pensamientos mágicos. Tristeza de no haber sido lo suficiente buena para ellos. Decepción de mis desenlaces. Dolor de cabeza. Sueño. Pesades en los párpados. Wi fi que no coopera. Ideas desordenadas. Sentimientos a flor de piel. Miedo de notar que estoy cambiando, grotescamente, como nunca antes. Miedo de convertirme en alguien que no quiero ser. Miedo de no ser aceptada después del cambio, de decepcionarlos. Siento que cambio, que cambié y que no puedo detener el cambio. Me da miedo dejar de ser quién fui hasta ahora, cambiar para mal. Decepcionar a los que me quieren, y decepcionarme a mí misma. Convertirme en lo que siempre detesté o critiqué. Comprendo que somos transformación constante, pero jamás sentí algo igual, sé que he madurado a través de mis diecinueves años, pero esta vez me siento testigo de cada uno de los cambios, puedo ver claramente, como a través de un crital cada cambio, cómo hubiera actado en el pasado y como me sale actuar ahora, soy testigo de los "no" inimaginables del pasado que hoy se hacen presente, con fuerza en mi deseo, como me voy volviendo intolerante a ciertas situaciones, como actuo sin pensar en las consecuencias, como en muchas circunstancias caigo en "me chupa un huevo" real, tajante. Estoy como colmada, colmada de hacer cosas que no quiero hacer porque los demás esperan que lo haga, cansada de estar actuando bajo la lupa de los demás, cansada de pensar mil veces qué paso dar, cuándo darlo y cómo, cansada de estar asustada todo el tiempo por el que dirán, de callarme para no desatar el enojo de los demás y de repente.. ya no puedo hacerlo más, ya no siento hacerlo más, y aunque quiera volver a eso, no puedo. Esto es lo que soy.
No puedo ya seguir volando tan alto, si quiero volver lo que deseo realidad, tengo que atarme los pies en la tierra y empezar a mover las fichas del tablero, para crear. CREAR. De a poco, pero con esfuerzo y constancia. Querer es poder.