Con vos todo termina en pared. Con vos después del pasillo, precipio. Con vos ésta cena carece de sabor. Con vos la birra siempre está caliente. Con vos el 84 nunca me para. Con vos el control de mis emociones se queda sin pila. Con vos el abrazo siempre es suelo y la mirada hueca. Con vos todo es superficial, llano. Con vos hasta lo diminuto toma dimensión. Con vos todo es inestable. Con vos todo se derrumba en un microsegundo. Con vos el frío y el calor se sientan a charlar meta mate de por medio. Con vos la escoba de mi dignidad no barre, no quiere. Con vos mi conciencia se retovó. Con vos a mi orgullo le pintó por tirarse a dormir una siesta. Con vos siempre es coma. Con vos siempre hay lugar a las segundas interpretaciones. Con vos siempre es soledad. Con vos este porro no pega. Con vos siempre es el pelo al huevo. Con vos mi poder de decisión se disolvió. Con vos siempre en un subi-baja. Con vos siempre es dormir. Con vos a la izquierda no está el baño, sino el derrumbe. Con vos nunca nada posee un poquito de sentido. Con vos hoy es adiós. Con vos mañana es Hola.
Con vos me transfondo en un fueguito con ganas constantes de apagarse. Con vos eso jamás es posible. Déjame. Dejá de tirarme rapitas. No. Dejá eso. No me aerees. Quiero consumirme, sola, solita. No. No te acerques. Qué no, que no se te llegue ocurrir volver a avivarme. No me querés. No elegiste éste fuego para consumirte, sólo sirvo para darte un calor, inutil, cuando el frío te acecha. No quiero esto para mí. Dejame apagarme, te lo ruego.
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